CRISTIAN TONCHEFF: «EL FÚTBOL ES UNA HERRAMIENTA APROVECHABLE POR LOS GOBERNANTES»

Cristian Toncheff (Chaco, 1982) es un futbolista y entrenador argentino que sigue estando activo en España, en la Primera División andaluza. Un atacante que ha jugado en numerosos campos y países a lo largo de los años, con recorrido por el ascenso de su país hasta llegar en 2007 a suelo español, donde vistió las camisetas de clubes como Peñarroya CF, Azuaga, UB Conquense, Gimnástico Alcázar y Villaralbo. De allí saltó a Gibraltar, que acababa de ser aceptada como miembro UEFA, donde pasó alguno de sus mejores momentos en el fútbol, viviendo un período sumamente prolífico, con actuaciones en competencias europeas y siendo mencionado en rankings de goleadores junto a grandes nombres del Viejo Continente. Sus últimos años se han caracterizado por un regreso a España y luego a Gibraltar, además de estancias en las ligas de Bahréin y Malta. Todas estas experiencias salieron a relucir en una amena charla para The Line Breaker.

En los últimos años te has enfocado mucho en trabajar las categorías inferiores y ya has cosechado tus primeros triunfos ¿Qué visión tienes a futuro de esto?

A modo personal, además de visión, tengo sueños con respecto a ser entrenador. Aunque reconozco que es un camino mucho más difícil por el que transitar, ya que no se trata sólo de preparación, filosofía de juego u otro valor que aporte a la consecución de ese objetivo o sueño. Hay cosas que están fuera del alcance de uno mismo, como las conexiones amistosas, conveniencias o bien, protocolos que últimamente adoptan los clubes grandes, por imposiciones políticas, ya que el fútbol es una herramienta aprovechable por los gobernantes, no solo de un estado o país, sino por quienes tienen beneficios que nada tienen que ver con el mismo deporte. Tengo evidencias de ello.

Hace unos meses atrás, el Fútbol Club Barcelona se contactó vía e-mail para convocarme a una jornada de elección de entrenadores para su escuela de fútbol, por lo cual debía rellenar un formulario en el mismo correo, dando disponibilidad de día para la parte teórica y práctica. Dicha solicitud tenía como requisito tener el certificado de vacunación para COVID-19, el cual no lo tengo por acceder a mi derecho fundamental de libertad de decidir no inocularme, ya que se

supone no es obligatorio, y en la que fui rechazado ¿Dónde queda la propaganda de «Respect» o no discriminación? Y como visión a corto largo veo un fútbol lamentablemente super industrial. Pero esperanzador si siguen componiendo este deporte personas que lo hayan vivido, y que se preparen para servir en diferentes sectores del fútbol.

¿Cómo fueron los inicios en Huracán de Corrientes, en tu país?

Fueron diferentes, particulares, ya que formaba parte de un plantel, pero no oficialmente por la incapacidad económica del club de darme los recursos esenciales para un adolescente, como es hospedaje y dietas, pero muy positivo en lo que a fútbol pude absorber.

Actualmente en la Primera Andaluza con Adra ¿Cómo describes el nivel de esta competencia?

Hay muchos enfoques en los que se pueden valorar o analizar. Desde lo estructural, bastante aceptable, aunque mucho por mejorar y, desde lo deportivo, percibo al equipo un escalón más por encima de los demás. A nivel general percibo ausencias, en características que tienen que ver con las estructuras que fueron formados esos jugadores en esos niveles. Formaron a chicos desde la teoría de un Fórmula 1, para después movilizarse en bicicleta. Considero más que nunca que el sentido común es la mejor metodología.

Fuiste el primer argentino en participar en la liga de Bahréin ¿Qué tal la experiencia en ese país?

Tuve la bendición de haber sido, hasta el año pasado, el único argentino en jugar en la liga de Bahréin, ya que hasta hace poco hubo otro chico allí (Leonardo Incorvaia en East Riffa), y se puede decir que fui el primero, y es muy positivo, ya que podrían llegar más argentinos.

Fue una gran experiencia, con muchos matices, pero inolvidable. A nivel personal positivo, ya que me ha dejado muchísimas cosas por las que compartir, no solo en amistades, sino en lo cultural y deportivo, sin lugar a duda.

¿Cómo te adaptaste al país? Culturalmente hablando.

Personalmente fue bueno, ya que siempre llevo el respeto como ayuda, y el fútbol es un instrumento universal, por el que no tiene idiomas, ideologías, ni nada que pueda dividir. A modo familiar, un poquito más prolongada la adaptación, pero satisfactoria.

La mentalidad de aceptación y estar abiertos a conocer, hacen que, de a poco, hagas tu espacio entre personas de diferentes maneras de vivir, como bien conocemos su fe al islam, y también su libro sagrado (Corán) habla de «amar» al prójimo.

Un día, bien dijo Kaoru Ishikawa :
El buen resultado es consecuencia de una ciega devoción por el proceso. ⚽🌏 #futbol #pasion #vida. pic.twitter.com/bmAhjH6Tas

— cristian toncheff (@CToncheff) February 21, 2021

Tienes un blog y también un podcast muy interesante (PALO SALVA!… A veces) ¿De dónde viene esa inquietud por comunicar?

Dos maneras de sentirme, de ayudar. El blog nace en medio de la pandemia, donde profundizar sobre lo que uno vivió en el fútbol, plasmarlo para que pueda ser de ayuda a quien así lo considere Y el podcast nace de la idea del hermano de un amigo que me dio el fútbol (Mariano Cornago), quien me propuso ser co-conductor del programa, y hacer un espacio a personas, experiencias que hacen el fútbol, pero que la industria no le encuentra beneficio, pero que al fin y al cabo hacen del fútbol un deporte más diverso en oportunidades y no sólo con tendencia a «elite».

Tú y el ascenso español tienen una larga relación ¿Qué consideras que ha cambiado desde que llegaste por primera vez?

Casi un sinfín de aspectos. Quizás por esa ambición de evolucionar todo y de una manera inmediata, en la que algo es favorable, pero en muchos aspectos también desfavorable. No comparto para nada hacer del fútbol una ciencia y, lamentablemente, están haciendo del fútbol algo que nada tiene que ver con el deporte. Desde la industria, junto con la tecnología, se están formando robots, con la inmediatez de resultados, y gran parte de culpa tienen entrenadores formadores, que prestan su ambición de lograr un puesto, estatus, a jugar a ser Guardiolas o Klopp, con niños que entienden el espacio y tiempo como diversión. Se involucionó en valores, los chicos de hoy necesitan muchos «Me Gustas», «Soluciones» y si es con «0» sacrificio, mucho mejor. Confunden a la sociedad con la falsa meritocracia, y con el verso de los números y cuantificación, ponen 3 power-points con estadísticas y son creíbles. Los niños vienen de casa con mensajes de entrenadores domésticos, de la casa, abuelos, padres, almaceneros, «todos entrenadores», así que imagínate, y lo lamentable es que estos «entrenadores» son formados por los programas basura de debate deportivo, cual ninguno habla de fútbol, pero todos critican. Imagina cuánto cambió el fútbol…

¿Extrañas Argentina?

Claro que sí y mucho. Los últimos años, debido a los protocolos impuestos por los políticos, no he podido ir de visita. Se extrañan los momentos con familia, amigos, lugares. Siempre echaré de menos mi tierra.

¿Cómo describirías el fútbol en Malta?

Un fútbol aprovechable para crecer y hacer crecer.

¿Alguna anécdota que contar?

Más que anécdota, tengo el recuerdo que me vino de un excompañero de Morón, el «Chino» Zárate. En la semana, al terminar los entrenos nos duchamos, y suelo llevar mi gel de ducha, cual lo comparto, siempre me piden. En una de las últimas uno de los chicos, más que con voz de pedir me lo exigía, y a poco de ponerme de mal humor, y decirle No, me vino a la cabeza cuando me ponía los perfumes sin permiso del Chino, de los que llevaba de Europa, y alguno que le regalaba Mauro y siempre con una sonrisa me dejaba. Cómo no lo iba a hacer yo con otro chico. Son detalles que hacen el día a día.

En Malta, con Fgura, se te dio la oportunidad de debutar como DT, ¿Cómo se dio esto?

Malta es, sin lugar a duda, otro regalo de Dios. Esa oportunidad llega después de casi siete años, cuando el mánager del club me conoció en 2012, pero nunca se reunieron las condiciones para ficharme. En 2019 me propuso no solo fichar como jugador, sino como entrenador del Sub-19 (equipo reserva del club), con dos objetivos cumplidos: el de permanecer en Segunda División el equipo de Primera y ascender a la reserva que venía de descender. Salimos campeones con chicos muy comprometidos, con la oportunidad de trasformar la desazón de chicos que venía de un descenso a ser campeones. Muy significativo e inolvidable todo.

Debo aclarar que mis primeras tomas de entrenador fueron en España, en 2008, cuando jugando para Peñarroya en los últimos meses el club me pidió que los ayudase con los infantiles, estando aún sin licencia de entrenador, el cual ya me nacía poder dar como herramientas a chicos en la formación.

Recordado tu paso por Europa, dónde convertiste muchos goles ¿Qué recuerdas de aquella época?

Muchos recuerdos, muchas circunstancias, mucho trasfondo. Saber que nunca fui un tocado por la gracia de Dios en lo que a talento se trata, pero que, con fe, esfuerzo, trabajo, Dios y el tiempo te llevan hacia donde deseas. De cada club de mi carrera tengo recuerdos de gratitud y alegres momentos, y más cuando de goles se habla.

Te codeaste con grandes nombres del fútbol europeo ¿Qué sentiste en ese momento?

Creo fueron premios que hacen el iceberg de mi carrera. Recuerdo que, de un día para otro, como sin darme cuenta, sin esperarlo siquiera, llegan a mi teléfono menciones de UEFA que me enviaban los encargados de la Federación donde me encontraba jugando (Gibraltar) y recuerdo haberlo recibido con muchas lágrimas de alegría y mucha paz.

¿Qué consejo le das a los chicos y chicas que recién están comenzando en este deporte?

Que tengan como combustible el propio sueño, de donde quieren llegar y quienes quieren ser. Y que no hay nada bajo el Sol, que tenga su tiempo de desarrollo y crecimiento natural, original. Soñando te aseguras un camino por el que aprender, pasar momentos, pero que, al final, llegarán a «ser».