Edgar Jiménez (España, 1991) es el nuevo entrenador de porteros de Orense SC, un equipo con poco tiempo de fundado y que viene de finalizar undécimo en el último torneo ecuatoriano. Posee la máxima titulación UEFA específica para su cargo y ya tiene varios años de experiencia en proyectos de fútbol juvenil en países como China, India, Estonia, Irlanda y clubes profesionales en Andorra y las categorías de ascenso de su país. En The Line Breaker hablamos de su nuevo reto en el país meridional y de su carrera en general.
Trabajaste en un proyecto juvenil en Dublín (Irlanda). Cada vez más españoles son solicitados para compartir su experiencia alrededor de mundo ¿Cuál es tu punto de vista?
Pienso que el fútbol español y el entrenador español tienen una muy buena reputación a nivel internacional. El buen trato de balón que hacen los equipos españoles, así como la selección, favorecen a ello, un fútbol alegre y valiente, siempre protagonistas con balón.
Luego de allí vuelves a España para trabajar con Izarra, en Segunda B ¿Cómo manejaste el cambio de ambiente?
Bueno, yo trabajé en el CD Izarra, equipo que milita en España y, a su vez, colaboré con los equipos de formación en Osasuna. Fue una época muy bonita, de mucho trabajo y aprendizaje a la vez. Cuatro Temporadas que dieron para mucho, con pandemia incluida en la fase final.
Una parte importante de tu carrera la has destinado al fútbol base, destacando el trabajo en escuelas en India y China ¿Cómo resultó la experiencia?
Es bonito conocer otras culturas y otras formas de entender el fútbol, diferentes metodologías de las cuales elegir para utilizar en mi propia metodología, siempre teniendo la mente abierta a conocer y descubrir lo que venga por delante. India fue el inicio de varios viajes y proyectos en Asia con etapas de fútbol base, un mundo que siempre me atrajo. El fútbol base es la etapa en la que se realizan los cimientos. De los grandes porteros que vemos años después en la élite, es un periodo fundamental y, en el cual, se está mejorando mucho, aunque queda camino por hacer. Debe tener más relevancia.
¿De qué manera crees que la implementación del análisis de vídeo apoya la preparación de los jugadores?
Es fundamental en el fútbol que vivimos hoy en día. El uso del análisis de vídeo propio y del rival es algo clave en el trabajo semanal, en nuestro caso, en cuanto a ese análisis previo preparamos el trabajo que realizaremos durante la semana. Todo eso intentando acercar al portero, lo máximo posible, las situaciones reales de juego que se le van a producir durante el partido y que tendrá que resolver con acierto.
Un análisis de vídeo que también llevamos a nuestras sesiones de entrenamiento, grabando cada una de las tareas propuestas para posteriormente analizar y revisar, en este caso con los porteros, y así ver las acciones desde diferentes perspectivas. De este modo buscamos la mejora en todos los aspectos que engloba la figura del portero.
Con AC Escaldes fue corta, pero intensa, tu estancia. Hace tiempo hablamos sobre el fútbol en Andorra ¿Cuál es tu punto de visto sobre el mismo?
Andorra fue una experiencia muy bonita, una liga pequeña y con muchas particularidades pero que sin ninguna duda irá a más. Su gran aliciente son esas plazas para jugar competiciones en Europa. Es una liga muy influenciada por el fútbol que se realiza en Cataluña (España). Hablamos de un fútbol asociativo, buscando ser poseedores del balón. En lo personal me sentí muy bien tratado por todo el mundo y tuve gran suerte de coincidir con grandes profesionales y personas.
¿Cómo se dio tu llegada a la liga ecuatoriana?
La opción de Orense SC se da a través de su entrenador (Andrés García). Nos conocemos desde hace varios años y siempre hemos estado en contacto y siguiendo nuestras trayectorias. Fue un orgullo y, a la vez, una responsabilidad el hecho de que Andrés contase conmigo para este proyecto. Conseguiremos grandes cosas, como él siempre dice: “El trabajo no se negocia”. La Liga Pro y Ecuador es un reto ilusionante para mí, un nuevo país y continente. Sólo tengo palabras de agradecimiento en estos dos meses que llevo aquí.
¿Tiene alguna anécdota o situación peculiar para contar?
Bueno infinidad, en el fútbol se dan situaciones “muy peculiares”. En Andorra teníamos que compartir, en ocasiones, instalaciones con rivales con los que al día siguiente tenías que jugar. Aquí en Ecuador actualmente entrenamos muy temprano porque a partir de cierta hora el calor lo hace inviable. Supongo que cada liga y país tiene sus curiosidades y particularidades, pero al final, en un sitio u otro, hacemos y nos dedicamos a lo que más nos gusta. Somos unos privilegiados
¿Cuál ha sido, para ti, un momento clave en tu carrera profesional?
¿Momento clave? Varios, siempre me quedo con lo positivo de cada experiencia y proyecto. De lo negativo se aprende y, a partir de ahí, no le doy importancia. Quizás momento clave es en ese momento en el que empiezas a darte cuenta de que tu sueño se convierte en realidad, llegar al profesionalismo, vivir de ello y compartirlo con tu gente. Son ya unas cuantas temporadas acumuladas en el fútbol profesional y espero que sean muchas más.
¿Metas a corto plazo?
A corto plazo, conseguir cumplir el objetivo de clasificarnos para una copa internacional con Orense SC y seguir superando los objetivos y metas que se nos presenten por delante.
¿Cuál es tu mensaje para esos jóvenes que se están iniciando en esto del fútbol?
Que disfruten de ello, que la pasión que tienen por lo que hacen es un factor importante que va a determinar hasta donde llegarán, que no se cansen de superarse y que disfruten del proceso.
